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Panamá luce despejada y solo los indígenas interrumpen la calma

La ciudad capital luce este viernes despejada, sin los habituales grandes problemas de tráfico en las principales avenidas, debido al día de asueto que decretó el Gobierno en las oficinas públicas y centros docentes con motivo de la XXIII Cumbre Iberoamericana, que se inaugura esta noche.

La calma que quiere el gobierno sólo fue trastocada por un centenar de indígenas de la etnia Ngäbe Buglé, quienes desde tempranas horas de la mañana protestaron frente a la Asamblea de Diputados, en la periferia de la ciudad, por el incumplimiento del Gobierno de los acuerdos alcanzados con ese pueblo aborigen.

El Gobierno decretó para hoy el cierre de las oficinas públicas nacionales y municipales, así como la suspensión de las clases en los centros docentes, secundarios y universitarios, del distrito capital, para descongestionar el tráfico durante la reunión de dirigentes de toda Iberoamericana en el país centroamericano.

" Teniendo en cuenta que el movimiento vehicular aumentará sustancialmente en razón del desarrollo de ambos eventos (...) y las dificultades de tránsito ya existentes por la construcción de las obras de mejoramiento vial en la ciudad de Panamá ", explicó la Secretaría de Comunicación del Estado en un comunicado.

La administración del presidente Ricardo Martinelli también está centrada en la culminación de la principal obra de infraestructura de su gestión, la línea 1 del Metro, que se construye a un costo aproximado a 1.800 millones de dólares y que se espera esté terminado antes de que concluya su mandato en julio de 2014.

La medida para agilizar el recurrente caos circulatorio también se extendió a las principales vías rápidas, en los sectores Norte y Sur de la capital, que serán gratuitos por un periodo de dos horas.

Sin embargo, el objetivo del gobierno panameño de mantener la capital panameña con poco tráfico y con tranquilidad social horas antes de inaugurar la Cumbre, fue contestada por los indígenas Gnöbe Buglé que en su protesta pidieron tener la posibilidad de poder hablar en la cumbre de presidentes.

El dirigente indígena Rogelio Montezuma dijo a los periodistas que el gobierno no ha entregado, entre otras cosas, el plan de desarrollo integral de los pueblos indígenas, que tampoco fue incluido en el presupuesto del Estado para el 2014.

" El plan de desarrollo que se hizo, no se ha formalizado y ninguno de los proyectos contemplados en ese plan están incluidos en el presupuesto de 2014 que ya fue aprobado ", indicó Montezuma.

No descartó organizar mañana una marcha a la sede de la Cumbre Iberoamericana.

La reunión de jefes de estado y gobierno iberoamericanos, con notables ausencias, se inaugura esta noche en un acto en las cercanías del Canal de Panamá y las sesiones de trabajo se desarrollarán durante toda la jornada del sábado en Playa Bonita, en un complejo hotelero aislado en las afueras de la ciudad.

De los 3,57 millones de habitantes que tiene Panamá, aproximadamente un 11 por ciento son indígenas de siete etnias, que han sido los protagonistas de las más grandes protestas en defensa de sus tierras ancestrales y contra la minería durante la actual administración de Martinelli.

FUENTE: EFE