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Trump y Clinton, una disputa voto a voto a apenas dos meses de elecciones

Los aspirantes a la Casa Blanca Hillary Clinton y Donald Trump están prácticamente empatados en las intenciones de voto a apenas dos meses de las elecciones presidenciales de noviembre, de acuerdo a sondeos publicados este martes.

Una encuesta divulgada en la jornada por la red de televisión CNN muestra al candidato republicano, el polémico multimillonario Trump, con una leve ventaja sobre su rival demócrata Clinton, 45% a 43%.

En tanto, un sondeo difundido por la red NBC News y realizado entre electores registrados muestra a Clinton por delante, con una respetable ventaja de 48% a 42%.

Para añadir más confusión al ambiente, el periódico Washington Post detalló un sondeo que muestra a Clinton adelante de Trump, en lo que atañe a una proyección de cantidad de votos en el colegio electoral que elegirá al próximo presidente estadounidense.

Más allá de las diferencias de metodología de los sondeos, los resultados muestran hasta qué punto la disputa se volvió ajustada en la recta final de la elección.

Trump y Clinton tienen ahora unas tres semanas para prepararse para una serie de tres debates, que son aguardados como la coronación de una campaña que tuvo momentos de estrépito y declaraciones fuera de tono.

Este martes, Clinton se desplazó a Florida para participar de un evento de registro de electores, al tiempo que Trump tenía en agenda una reunión en Virginia y un acto de campaña en Carolina del Norte.

El lunes, Clinton y Trump utilizaron el feriado nacional por el Día del Trabajo para eventos de campaña.

"Estoy lista. Estoy más que lista", dijo Clinton en un acto público en Cleveland, en referencia a la intensa batalla que tiene por delante en los dos próximos meses si desea llegar a la Casa Blanca.

Clinton estrenó un avión de campaña -que tiene el lema "Más fuertes juntos" en el costado- e invitó a la prensa para un sorpresivo encuentro a bordo.

Objeto de furiosas críticas de parte de Trump y de la prensa por no ofrecer una conferencia de prensa en nueve meses, Clinton respondió preguntas durante unos 22 minutos, y hasta habló de las tensiones con Rusia ante denuncias de espionaje cibernético.

La exsecretaria de Estado expresó su "grave" preocupación ante reportes que acusan a Rusia de interferir en el proceso electoral estadounidense mediante la invasión de los sistemas del partido Demócrata y un supuesto ataque al mecanismo de registro de electores en Arizona.

Clinton incluso sugirió que Rusia podría estar tratando de ayudar a Trump. "Creo que es intrigante que esta actividad ha ocurrido al mismo tiempo que Trump conquistó la nominación" presidencial por el partido Republicano, comentó.

Pocas horas más tarde, Trump siguió el ejemplo e invitó a un grupo de periodistas a su avión particular, para una conversación en la que volvió a discutir detalles de sus propuestas para tratar de la cuestión migratoria.

En la visión de Trump -quien hace una semana visitó México en su primer viaje internacional como candidato presidencial-, Clinton simplemente no tiene un plan sobre el tema migratorio.

"En realidad su plan apenas se trata de una amnistía total" y un camino a que esas personas logren la ciudadanía, dijo el candidato presidencial, para reiterar que la prioridad antes de cualquier paso es que los inmigrantes indocumentados se vayan del país.

Si se sigue la propuesta de Clinton, dijo Trump, "cualquier persona puede cruzar la frontera y a nadie le importa quién es esa persona".

En contrapartida, Clinton recordó que Trump viajó a México y terminó envuelto en una polémica con el presidente Enrique Peña Nieto por su propuesta de construir un muro en la frontera.

Trump "es incapaz de ir a un país amigo sin meterse en peleas", dijo Clinton durante un acto público en Hampton, Illinois.

En un encuentro con sindicalistas en Ohio, Trump dijo que su campaña encontraba eco entre los trabajadores por sus frustraciones con relación a los salarios y las oportunidades de empleo.

En general, en esta fase de la campaña los dos candidatos se concentran en los estados en que sus partidos son tradicionalmente fuertes, como forma de garantizar los votos que otorgan al colegio electoral.

FUENTE: AFP