Brasil Internacionales - 

Lula pierde a su esposa cuando lidia con la justicia y piensa en el poder

La muerte este jueves de la mujer con la que estuvo casado 43 años y que acompañó activamente toda su carrera política supone un nuevo golpe para Luiz Inácio Lula da Silva en momentos en que enfrenta cinco procesos por corrupción y estudia disputar nuevamente la Presidencia de Brasil.

Marisa Letícia Rocco, que estaba hospitalizada y en coma desde el 24 de enero por un derrame cerebral, era la segunda esposa de Lula, con quien contrajo matrimonio en 1974, cuando ambos eran viudos, y fue primera dama de Brasil entre 2003 y 2010.

"Fuerza Lula" fue el hashtag más utilizado en las redes sociales en los mensajes de pésame y solidaridad para con el exmandatario y en los que se le insta a superar las dificultades para proseguir su carrera sin la que fuera considerada como su principal sustento y más cercana consejera política, que murió a los 66 años.

Pese a su discreción como esposa del dirigente y como primera dama, Rocco tuvo participación directa en algunos de los momentos más decisivos para Lula, como la fundación del Partido de los Trabajadores (PT), las protestas por su liberación cuando la dictadura lo encarceló, las campañas electorales en que fue derrotado y las que venció, y hasta la lucha para vencer el cáncer que padeció.

Pero más allá de ese papel político, "doña Marisa", como la llamaba el propio Lula, tuvo un papel importante y personal en la trayectoria del exmandatario al asumir todas las responsabilidades domésticas y familiares del dirigente y liberarlo para que se dedicara por entero a la política.

"Doña Marisa fue la base de su familia, la base para que Lula pudiese dedicarse de cuerpo y alma a la lucha por la construcción de un nuevo Brasil, más justo, más solidario y menos desigual", afirmó la expresidenta Dilma Rousseff, sucesora y ahijada política de Lula, en el comunicado en que manifestó su pésame.

De acuerdo con Rousseff, Rocco fue la base de la carrera de Lula "desde las primeras reuniones sindicales en Villa Euclides, pasando por la fundación del Partido de los Trabajadores (PT) y de la Central Única de los Trabajadores (CUT), hasta la llegada de la Presidencia de la República".

Su muerte abrió una duda sobre el futuro de Lula, sobre la que pocos se atreven a especular.

"El impacto de la muerte en la vida de Lula será enorme. Era ella quien cuidaba de la familia para que él pudiese dedicarse integralmente a la política", aseguró en su blog Ricardo Noblat, uno de los columnistas políticos más leídos del diario O Globo y uno de los pocos a abordar el asunto.

De acuerdo con Noblat, "era Marisa la que traía a Lula de regreso a la realidad cuando él se alejaba e influyó algunas en sus decisiones más importantes, aunque Lula no siempre reconociese eso".

La ex primera dama no llegó a pronunciarse públicamente sobre los cinco procesos por corrupción que fueron abiertos en los últimos meses contra Lula, en tres de los cuales aparece también como procesada, pese a la insistencia del expresidente de atribuirlos a una "persecución política" y a sus peticiones para que su familia fuera dejada fuera de las disputas políticas.

Según la Fiscalía, Rocco también se benefició de las supuestas ventajas que le fueron ofrecidas a Lula por las empresas interesadas en contratos con la petrolera estatal Petrobras, como un apartamento de playa y una casa de campo cuya propiedad se atribuye a la pareja.

La ex primera dama tampoco llegó a pronunciarse en público sobre las declaraciones en las que Lula admite insistentemente en la posibilidad de disputar las elecciones presidenciales de 2018 como forma de recuperar protagonismo, hacer frente a la "persecución política" y recuperar el poder que el PT perdió con la destitución de Rousseff en agosto pasado.

"Lula concluyó que solo el protagonismo político sería capaz de salvar su futuro, pero Marisa pensaba lo contrario. Le recomendaba que fuese discreto y que no afrontase la Fiscalía y la Justicia", según Noblat.

El expresidente ha mantenido silencio desde que el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo anunció la muerte cerebral de su esposa.

Tan solo divulgó un comunicado en su página en Facebook para agradecer los mensajes de solidaridad y anunciar la decisión de la familia de donar los órganos de su esposa, y cambió su fotografía en las redes sociales por una en la que aparece con "doña Marisa".