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Juncker: UE se recupera de una década marcada por la crisis

La Unión Europea se “está recuperando” tras una década difícil en la que la mayor parte de sus 28 estados miembros sufrieron una crisis económica y en la que Gran Bretaña decidió abandonar el bloque, dijo el miércoles el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.

“Europa vuelve a tener el viento a favor”, dijo Juncker a legisladores comunitarios en su discurso anual sobre el “Estado de la Unión”.

Juncker, cuya Comisión es la encargada de proponer la legislación comunitaria y controlar la normativa, dijo que la UE vive su quinto año de recuperación económica, con una tasa de paro en su nivel más bajo en nueve años.

"Europa responde a sus ciudadanos cuándo y dónde lo necesitan”, aunque las naciones sigan divididas sobre la mejor forma de gestionar la crisis de refugiados, agregó.

Según Juncker, el bloque comunitario “tiene una responsabilidad colectiva” para ayudar a mejorar las condiciones en las que están detenidos los migrantes en Libia y debe colaborar de forma más estrecha con la agencia de refugiados de la ONU para asegurar que esta “escandalosa situación” no continúe.

La UE recibió críticas por sus políticas para Libia, que buscan frenar la llegada por mar a Italia de personas que huyen de África. Como resultado, muchos migrantes están atrapados en peligrosos y maltrechos centros en un país sacudido por años de conflictos.

En su comparecencia, Juncker también se refirió al proceso de divorcio con Gran Bretaña y dijo que la UE “seguirá adelante una vez se marche Gran Bretaña”, señalando que “el Brexit no lo es todo, no es el futuro de Europa”.

El presidente de la Comisión convocó a los líderes de los 27 estados restantes a congregarse el 30 de marzo de 2019 en la ciudad rumana de Sibiu, unos 280 kilómetros (175 millas) al noroeste de la capital, Bucarest, para abordar el futuro del bloque.

Gran Bretaña tiene previsto abandonar el bloque el día anterior.

Ante los vítores de legisladores británicos celebrando la salida de su país, Juncker dijo: “Creo que lo lamentarán bastante pronto”.

Por otro lado, el presidente de la Comisión dijo que no puede aceptar que los consumidores en el centro y este de Europa reciban en sus tiendas alimentos de peor calidad que otros que se venden en el resto del bloque con el mismo etiquetado.

Esa práctica ya es ilegal, afirmó Juncker, pero el bloque hará más por comprobar el cumplimiento de la normativa sobre calidad alimentaria en el grupo.

Autoridades y consumidores de países como Hungría y Eslovaquia han expresado su frustración porque algunas marcas internacionales venden en sus países productos con peores ingredientes que los comercializados en otros lugares.

La promesa de Juncker de abordar el problema se interpretó como un intento de mejorar las en ocasiones tensas relaciones entre la Comisión y zonas de Europa Central.

FUENTE: AP

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