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Cierran los colegios electorales en Puerto Rico sin incidentes

Los colegios electorales de Puerto Rico cerraron hoy sus puertas tras siete horas abiertos para recibir a los votantes que quisieron participar en las primarias demócratas de EE.UU. así como en las locales, en las que se eligen a decenas de cargos públicos.

Ésta ha sido la primera vez que se ha utilizado en la isla un sistema electrónico de recuento de votos, sin que se hayan producido grandes problemas, y también la primera ocasión en la que no se ha aplicado la Ley Seca, que esta semana fue derogada por el gobernador, Alejandro García Padilla, para todos los procesos electorales salvo los comicios generales.

El gobernador no buscará la reelección en noviembre, pero su partido ya tiene un candidato seleccionado para relevarle: David Bernier, hasta hace poco secretario del Estado con García Padilla y ahora presidente del gobernante Partido Popular Democrático (PPD).

Su rival en las urnas se decidirá con los votos de hoy y será o bien Pedro Pierluisi, presidente del opositor Partido Nuevo Progresista (PNP) y representante en Washington de Puerto Rico (lo que se conoce como comisionado residente), o bien Ricardo Rosselló, hijo de un exgobernador muy apreciado en la isla.

En ese partido, que también elige hoy candidatos a múltiples alcaldías y escaños legislativos, los aspirantes a comisionado residente son Jenniffer González y Carlos Pesquera; mientras que en el gobernante PPD se postulan Héctor Ferrer y Ángel Rosa.

Sin embargo, fuera de la isla lo que más atención acapara -además del candidato a gobernador del PNP, que tendrá muchas posibilidades de ser el próximo gobernador de Puerto Rico- es el resultado de la primaria demócrata, donde Hillary Clinton parte como favorita sobre Bernie Sanders, que sin embargo ha realizado una campaña mucho más intensa y comprometida.

Según el recuento de muchos analistas, Clinton se encuentra a tan sólo 60 delegados para garantizarse la nominación, exactamente los mismos que están hoy en juego en Puerto Rico, donde la exsecretaria de Estado de EE.UU. necesitaría hacerse con el 85 % de los votos para adjudicárselos todos.

La presidenta de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Liza García Vélez, había pedido a los votantes que acudieran con tiempo a los centros de votación en previsión de que hubiera largas filas o que se registraran problemas con el nuevo sistema de votación, aunque finalmente no ha sido así.

"El llamado al elector es que vaya temprano a su salón de votación y se prepare con mucha calma para, no solamente ejercer su derecho al voto por primera vez con la máquina de escrutinio electrónico, sino para darle la oportunidad a los otros electores que están antes de poder interactuar con la máquina", dijo esta semana.

En esta ocasión, los puertorriqueños que acudieron a votar -se calcula que unos 600.000 del PNP y unos 200.000 del PPD, para una población de 3,5 millones de habitantes- se encontraron con cinco papeletas, que se usan por ambos lados.

Unos 7.000 agentes velaron por la seguridad en los más de 1.500 colegios electorales repartidos por los 110 precintos en que está dividida la isla, así como en sedes de equipos de campaña y partidos.

Por el gobernante PPD se eligen 11 alcaldías, 12 distritos representativos y 3 distritos senatoriales, así como varios legisladores y el comisionado residente.

Los comisionados electorales, Jorge Dávila por el PNP, y Guillermo San Antonio Acha por el PPD, aseguraron que en general las papeletas y las máquinas del escrutinio electrónico llegaron temprano a los centros de votación, aunque en algunos los electores denunciaron retrasos en la disposición de las urnas.

Aunque para las primarias locales se han habilitado más de 1.500 centros de votación por cada partido, los mismos que se habían prometido para las del Partido Demócrata de EE.UU., finalmente para esta última contienda sólo se han abierto 455, lo que ha desatado las quejas de la campaña de Sanders, que considera que esto reducirá la participación.

En cualquier caso, esos 455 centros son cuatro veces más que el número de habilitados en las primarias republicanas que se celebraron en la isla en marzo pasado.

El caos sobre en qué colegios se podía votar por cada contienda, ya que hasta el sábado pasado no estaban todos claros, hizo que cientos de ciudadanos expresaran hoy sus quejas, argumentando que algunos habían tenido que visitar durante la mañana varios centros para tratar de encontrar el que les correspondía, y que en algunos casos los encargados aún no estaban listos para recibir votantes.

Aunque en general la jornada transcurrió sin grandes incidentes, en un colegio de Corozal, en el interior de la isla, se produjeron varios arrestos después de que partidarios de un candidato del PPD no dejara acceder al centro de votación a seguidores de su rival.

La campaña de Sanders también ha denunciado que no se les había permitido el acceso a los centros penitenciarios, donde miles de presos pudieron votar el sábado, mientras que a los de Clinton sí.