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Carla Pereyra se emociona al recordar su boda

Han pasado ya tres días desde que Carla Pereyra y Diego Pablo Simeone volvieran a contraer matrimonio a través de una celebración algo más elaborada y tradicional que la que les llevó, el pasado 15 de junio, a convertirse en marido y mujer por primera vez tras un viaje exprés a su Argentina natal.

En esta ocasión, los dos enamorados congregaron a sus seres más queridos, incluidas sus pequeñas Francesca y Valentina -quienes no acudieron a la primera ceremonia-, en un entorno tan bucólico como el que les ofrecía la Toscana italiana, y la modelo no dudó en recurrir a un traje de boda completamente blanco y de corte tradicional para presentarse espectacular en su condición de novia.

Esta semana, la también diseñadora ha querido compartir con sus seguidores de Instagram una de las primeras fotos oficiales que ya han trascendido de la "inolvidable" jornada: una imagen que deja patente no solo la felicidad que irradiaban los contrayentes, sino también las preciosas vistas que presidían el encuentro y, por supuesto, los detalles de un elegante vestido de novia firmado por la casa Dior.

"El sabado 7 de septiembre decidimos celebrar nuestro amor y rodearnos de los más nuestros, en un entorno idílico en el corazón de la Toscana. No hay palabras que describan todo lo que pudimos vivir y sentir, en el corazón de cada uno de los que nos acompañó quedarán momentos que serán inolvidables", ha escrito una emocionada Carla en su cuenta de Instagram antes de hacer una "mención especial", en perfecto italiano, a la principal responsable de que su gran día fuera todo un éxito a nivel organizativo."

Gracias a nuestras familias, a los más amigos, ¡a todos los que nos hicieron tan felices! Y una mención especial a la persona que más se ocupó de que todo esto fuese un sueño hecho realidad. Silvia Slitti, eres la número uno", le ha dirigido a la reputada 'wedding planner' en la misma publicación.

Aunque ella misma ya reveló en su momento que sus dos hijas, sobre todo su primogénita Francesca, jugarían un papel muy destacado tanto en la ceremonia como en la posterior fiesta, por el momento poco se sabe sobre la misión concreta que le habría sido encomendada a la niña el pasado sábado y, menos aún, sobre la posibilidad de que su vestido rosa literalmente "volara".

"Francesca está muy entusiasmada, no para de repetir eso de que 'se casan mamá y papá'. Le hemos enseñado vídeos de bodas y sueña con que su vestido rosa 'vuele'", explicaba hace unas semanas en conversación con la revista ¡Hola!