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Diego Luna asemeja su papel en 'Star Wars' a la idea de estar enamorado

El actor Diego Luna no podría estar más entusiasmado ante la idea de aparecer en la nueva película de una de las sagas cinematográficas que adora desde que solo era un niño, hasta el punto de que no ha dudado en comparar la "sorpresa" que le produjo la noticia de que formaría parte del reparto de 'Rogue One: A Star Wars Story' con la que se lleva cada vez que encuentra el amor sin haberse propuesto buscarlo.

"Es posible que sea una persona demasiado romántica, pero me resulta imposible no acabar enamorándome de alguien cuando viajo por el mundo. Soy de esas personas que, cuando deja de obsesionarse con ello, acaba hallando el amor en el momento más inesperado. En este caso tampoco me imaginé que pudiera ocurrir [conseguir un papel en la cinta], por lo que creo que las mejores cosas de la vida son las que te pasan por sorpresa. Si no me hubiera llegado esta oportunidad, quizá ahora estaría haciendo teatro", se sinceró el intérprete al portal Red Bulletin.

El optimista intérprete está convencido, y tiene razones para creerlo, que la llegada de nuevos e ilusionantes proyectos procedentes de la meca del cine son el resultado no solo de su sólida trayectoria artística, sino de una mentalidad que le lleva a no fijarse grandes expectativas y a dedicarse únicamente a trabajar duro.

"Pienso que todo esto ha surgido únicamente porque no he dejado de trabajar, aunque fuera en diferentes formatos y países, en lugar de tener aspiraciones muy concretas. Cuando concentras tu energía en hacer tu trabajo lo mejor posible y no desvías el rumbo, todo empieza a funcionar como quieres y la vida acaba dándote sorpresas muy positivas", explicó.

Aunque en más de una ocasión ha reconocido que suele sentirse más cómodo protagonizando filmes de corte independiente, Diego asegura que el rodaje de 'Rogue One' no le ha resultado especialmente intimidante pese a contar con un elevado presupuesto y después de comprobar que los fans de la franquicia han depositado grandes esperanzas en el filme.

"Me he dado cuenta de que el tamaño [de la producción] no es tan importante cuando todo el mundo implicado en la película tiene las ideas muy claras. De hecho, gracias a Gareth Edwards, el director, a veces tenía la impresión de que estaba haciendo cine alternativo, porque el grupo siempre estuvo muy unido y todos congeniamos muy bien en el set", apuntó.