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Daniela Vega: "El cine de Chile es un espacio de resistencia y de amor"

La actriz santiaguina Daniela Vega, una de las personalidades más influyentes del mundo según la revista Time, defiende que lo que hace que Chile sea hoy una potencia en la industria cinematográfica mundial es "la resistencia" de sus equipos de trabajo y el enorme amor que les mueve.

"El cine de Chile es un espacio de resistencia y de puro amor por lo que hacemos, y reclamo el protagonismo de tanta gente como se necesita para hacer cine, porque para mi (reflexiona Vega en una entrevista con Efe) una película es un gran 'pasticho', un mosaico en el que cada pedacito cuenta para armar esta imagen".

"Y yo (añade) estoy muy agradecida a los equipos con los que he trabajado, muy agradecida a CinemaChile y muy agradecida al público".

La actriz visita Madrid con su amiga y compañera Antonia Zegers para presentar la Semana del Cine Chileno, una celebración que empieza aquí para seguir después en París y Berlín.

"Es pura celebración con la cifra mágica del diez", apunta Zegers: los diez años que cumple CinemaChile, el organismo de promoción exterior del cine del país andino, diez de las mejores películas producidas por Chile en los últimos diez años, y diez cineastas de prestigio para charlar de cine con quienes acudan a los cines Golem, desde este jueves al domingo.

Zegers apunta que también han sido determinantes las coproducciones, porque los fondos para ayudas a la cinematografía en Chile son exiguos, y reclama con gracia parte del sueldo de los embajadores chilenos porque "nada como el cine de Chile. Somos el mejor embajador", bromea, aunque precisa que es así gracias a su calidad.

"Tendríamos que tener mucho más apoyo y estar todos orgullosos porque verdaderamente nos hemos hecho famosos por los contenidos y no por grandes campañas publicitarias", opina Vega, ganadora del Óscar por "La mujer fantástica" (2017) en su papel de mujer transgénero, que se nutrió de la propia experiencia personal.

Vega debutó a los 16 años y, desde entonces (el sábado cumple los treinta) su carrera ha sido imparable; además del Óscar, ganó el Fénix y el Platino por ese mismo trabajo y hoy alterna largometrajes en Europa con series como la documental "PeacePeace NowNow", que también produce, sobre mujeres que han hecho frente a la violencia en el mundo, o "Historias de San Francisco", para Netflix.

"Nosotras somos actrices y solo pensamos que cuanto más trabajo tengamos, mejor", señala Vega sobre la irrupción de las plataformas, a lo que Zegers agrega que "cualquier cambio llega con su oposición, pero el cambio viene (advierte) y Netflix hace 'Roma' y cierra todas las bocas".

A esto, Vega añade que, como actrices, no piensan para quién trabajan, sino "sólo en emocionar y hacer bien el trabajo".

"Como te digo, esto son equipos. Mi trabajo es actuar, otro, la distribuye y otro, la promociona. Y luego llega el domingo y uno se lo pone la tele; es un círculo hermoso y una oportunidad preciosa que tiene el arte para conectar con los demás".

"Nosotras no podemos hacer nuestro trabajo si no podemos conectar con los demás; si no, yo me dedicaría a hacer algoritmos en una oficina", provoca Vega, a lo que Zegers replica: "pues yo queques (bizcochos)", provocando la carcajada de ambas.

Las actrices han logrado una enorme sintonía tras compartir el rodaje de la serie "La jauría", dirigida por la argentina Lucía Puenzo, donde interpretan a dos mujeres policías que se enfrentan a un caso de ciberacoso, "un monstruo sin cabeza que tiene que ver con la red".

Mientras Vega confía el futuro feminista a los niños, porque está convencida de que "las mujeres que hoy somos es el resultado de una cadena y del cambio que generaron madres y abuelas", Zegers centra la atención en la lucha: "Todo lo hemos conseguido luchando: votar, tomar pastillas anticonceptivas, entrar en el mundo laboral. Nada ha sido gratis".

Así, cambiar el mundo, lograr la aumente la empatía o ayudar a crear una sociedad más justa está en el ADN de estas mujeres que "viven para trabajar", responden a dúo, que no tienen "plan B" y que usan "el trabajo como armadura".

FUENTE: EFE