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Venezuela intenta someter exorbitante valor de dólar negro con nuevo mercado

El gobierno venezolano creó un nuevo mercado de cambios en un intento por someter el exorbitante valor del dólar paralelo, pero su apuesta dependerá, entre otros factores, de cuántas divisas inyecte en ese mecanismo, dijeron analistas.

Acosado por la inflación más alta de América Latina y uno de los peores niveles de escasez de productos de la última década, el gobierno chavista se ha visto obligado a flexibilizar el férreo control cambiario vigente desde 2003 --donde el dólar paralelo cotiza trece veces más alto que el oficial-- con la creación de un tercer mercado de asignación de divisas, llamado "dólar permuta".

"El impacto del nuevo mercado cambiario dependerá de la cantidad de divisas que se dispongan en él", explicó a la AFP el economista Luis Vicente León, presidente de la consultora Datanálisis.

"Si una parte de de la demanda de dólares queda insatisfecha, el dólar negro va a seguir igual", opina por su parte el ex directivo del Banco Central de Venezuela (BCV), José Guerra.

El viceministro para el Área Económica y presidente de la petrolera estatal PDVSA, Rafael Ramírez, responsable de gestionar los casi 100.000 millones de dólares anuales que ingresan al país por la venta de crudo, explicó el lunes que con este nuevo sistema, personas y empresas privadas podrán comprar y vender a diario dólares en efectivo o a través de títulos de valores.

La liquidación de parte de las divisas de Pdvsa en este mercado y a valores más altos debería ayudar a reducir el déficit fiscal venezolano, estimado en 15% del Producto Interno Bruto, uno de los motores de la inflación.

Asimismo la liquidación de divisas adicionales y mas caras absorberá mayor cantidad de bolívares circulantes y contribuirá a reducir la presión inflacionaria. La liquidez del sistema creció un 73% en el último año.

"Vamos a ir satisfaciendo la demanda de dólares, así la gente no tendrá de recurrir al mercado negro", aseguro Ramírez, uno de los ministros más veteranos del chavismo.

Sin embargo, Ramírez no precisó a qué tasa va a cotizar ni cuántos dólares se va a inyectar en ese mercado -sólo dijo "una cantidad importante de recursos"-, un dato que para los expertos es clave si se quiere contener el avance del "dólar negro", que esta semana cotiza a que esta semana cotiza a 83 bolívares por dólar, 13 veces superior a la tasa oficial de 6,30.

El dólar negro, también llamado paralelo, es otro de los responsables del avance de inflación, pues muchos productos de uso cotidiano están calculados a esa tasa, bien porque han sido importados con ese dólar o por especulación de los comerciantes.

Con el "dólar permuta", la vida económica de los venezolanos pasa a estar valorada a través de cuatro tipos de cambio: la mayoritaria tasa oficial, a 6,30 bolívares por dólar, para importaciones prioritarios (alimentos y medicinas); la tasa Sicad, a 11,80 dólares a través de subastas semanales para otros sectores, en especial turismo; la tasa del "permuta", que podría ser de entre 20 y 30 bolívares, y la disparada tasa paralela.

La pregunta es si el gobierno dispone de suficientes divisas para abastecer el nuevo mercado permuta en su lucha contra el paralelo, en un contexto de estancamiento de la producción y venta de petróleo, de un leve descenso del precio del barril, de aumento del gasto público y del déficit fiscal y de pago de la deuda externa.

"La brecha que existe entre la oferta y la demanda es de unos 30.000 millones de dólares, pero no sé de donde van a salir. Nuestros cálculos nos indican que podría haber unos 20 millones de dólares diarios, demasiado poco", explica el economista Máxim Ross, fundador del Centro de estudios de economía venezolana de la Universidad Monte Ávila.

"Es difícil preverlo, depende de la disponibilidad que tenga PDVSA, de cuánto pueden destinar a este mercado. También hay que ver si la mayoría va a ser con bonos o con efectivo, eso también cambia un poco la disponibilidad o si van a aumentar la emisión de deuda", explica el economista Asdrúbal Oliveros director de Ecoanalítica.

Según él, probablemente el gobierno tenga que reacomodar las cantidades de divisas que destina a cada tasa. "Si me empeño en liquidar gran cantidad de divisas a 6,30 y 11,80, efectivamente no hay suficientes divisas. La tasa sobrevaluada seguirá estimulando la corrupción y fomentando el mercado negro", advirtió.