Tras terminar su partido con los Yankees de Nueva York que perdieron con los Rancheros de Texas, el cerrador panameño Mariano Rivera se trasladó al Cowboys Stadium para apoyar a la selección de Panamá que se impuso 2-1 a México y avanzó a la final de la Copa Oro.
Acompañado de su esposa, Mariano vio los últimos minutos del encuentro en un palco del coliseo deportivo y al finalizar bajó al vestuario de Panamá donde rezó junto a los jugadores panameños a quienes felicitó por la victoria.
El lanzador panameño dijo tras el encuentro "Hoy lucieron fenomenal, hicieron un trabajo espectacular, cuando Dios está en el asunto no falla y se vio que estaba con los muchachos".
"Quisiera estar con ellos en Chicago, pero tengo mi trabajo, mis oraciones estarán con ellos".