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Flamengo inicia año con incertidumbre por crisis

BRASILIA ( AP ). El 2012 pinta como un año difícil para Flamengo, el club más popular de Brasil.

Su astro Ronaldinho amenaza con no jugar si no le pagan cinco meses de salario atrasado, el talentoso volante Thiago Neves se marchó al archirrival Fluminense y el defensa Alex Silva se negó a viajar con el equipo a Bolivia para el partido contra Real Potosí por la Copa Libertadores, también por falta de pago.

El conjunto rojinegro parece estar sumergido en una crisis sin salida a la vista, en momentos que se apresta a iniciar su participación en la Libertadores y el campeonato estatal de Río de Janeiro.

La disconformidad campea entre sus jugadores y sus aficionados temen por lo que hará el equipo en los torneos de este año sin refuerzos convincentes.

La presidenta del equipo, Patricia Amorim, salió al paso de las críticas para negar que la situación del equipo sea de crisis, aunque no pudo explicar la revuelta de los jugadores que alegan falta de pagos. El club tampoco ha divulgado sus finanzas.

" Hay mucha tontería que se está diciendo, comenzando por la crisis financiera que se menciona, lo cual no es verdad. Es importante que se diga que no hay salarios atrasados ", aseguró Amorim el lunes en una conferencia de prensa en la sede del equipo.

Como un mentís al optimismo de Amorim, el archirrival Fluminense anunció el miércoles la contratación del volante Thiago Neves, en momentos que Flamengo intentaba retenerlo una temporada más.

" Ahora es oficial, el Fluminense Football Club comunica el acuerdo con el jugador Thiago Neves. Todas las negociaciones financieras fueron concluidas con éxito y faltan solo los últimos trámites burocráticos ", declaró el conjunto tricolor de Río de Janeiro en un comunicado en su sitio de internet.

En su conferencia de prensa del lunes, Amorim criticó al "Flu" por buscar la contratación del habilidoso zurdo cuando Flamengo intentaba retenerlo, y calificó la acción como una "falta de ética", sin ofrecer soluciones para contratarlo.

Más compleja es la situación con Ronaldinho, quien la temporada pasada llegó al Flamengo como la contratación más sonada del año, aunque su rendimiento estuvo por debajo de lo esperado por los seguidores del club.

El ex astro del Barcelona optó por Flamengo con un contrato millonario en el que la mayor parte de su salario es pagado por la empresa de promoción deportiva Traffic. Amorim se reunió esta semana con agentes de la compañía para tratar de resolver el desembolso de los salarios atrasados, que según el jugador asciende a 3,75 millones de reales (2,1 millones de dólares).

Su hermano y representante, Roberto Assis Moreira, aseguró que hay varios equipos dentro y fuera de Brasil interesados en contratar al talentoso volante de 31 años en caso que no resuelva su situación salarial.

Entre tanto, Ronaldinho viajó con el equipo a Bolivia y se entrena normalmente de cara al partido del 25 de enero, pero mantiene la amenaza de no jugar si no hay un entendimiento con sus salarios atrasados.

Por si fuera poco, la prensa deportiva de Brasil ha informado que las relaciones de Ronaldinho con el entrenador Vanderlei Luxemburgo se deterioraron al punto que casi ni se hablan.

El diario Extra de Río publicó el miércoles que Luxemburgo había pedido separar al jugador del equipo después de encontrarlo con una mujer en un hotel de Sucre, Bolivia, donde el equipo se concentró.

De hecho, Ronaldinho no se entrenó ese día con el equipo en la ciudad boliviana, pero el sitio de internet del club atribuyó su ausencia a una diarrea. La oficina de prensa de Flamengo negó que el jugador fuera a ser separado.

Quien ni siquiera viajó con el equipo fue el zaguero Alex Silva. El jugador se negó a abordar el avión que partió el lunes a Bolivia por falta de pago, lo que la presidenta Amorim calificó como una " falta grave ".

Flamengo decidió separarlo, pero el director de fútbol del equipo, Luiz Augusto Veloso, dijo que el defensor tiene que presentarse a entrenar con el grupo que permanece en Río, y que los días que no comparezca serán descontados de su salario mientras se decide cómo resolver su situación.

FUENTE: Agencia AP

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