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Di María y Martial marcan un verano de traspasos millonarios en Francia

El mercado del fútbol francés ha vivido este año el verano más agitado de su historia con dos operaciones récord: la llegada del argentino Ángel Di María del Manchester United al París Saint-Germain por 63 millones de euros y la venta de Anthony Martial del Mónaco a los "reds" por 60 millones y 20 en objetivos.

El fichaje del extremo albiceleste se fue gestando lenta y públicamente y terminó por cerrarse el 6 de agosto, cuando el exmadridista, de 27 años, rubricó un contrato de cuatro temporadas por el PSG, donde se unirá a sus compatriotas Ezequiel Lavezzi y Javier Pastore y a jugadores como el sueco Zlatan Ibrahimovic, el uruguayo Edinson Cavani o los brasileño Thiago Silva y David Luiz.

"El fideo" se ha convertido en la contratación más lustrosa y en el único fichaje ofensivo del club parisino bajo control catarí, que ha pagado 10 millones al Toulouse por el lateral derecho marfileño Serge Aurier, más de 8 al Tottenham por el mediocentro defensivo Benjamin Stambouli, 9 al Eintracht Francfort por el portero Kevin Trapp y 25 millones al Mónaco por el lateral izquierdo Layvin Kurzawa.

Liberado de las constricciones del "juego limpio financiero" de la UEFA, el vigente campeón de la liga francesa, que entrena Laurent Blanc, ha invertido un total de 115 millones y ha recaudado algo más de 16 millones en traspasos, esencialmente con la venta de Yohan Cabaye al Crystal Palace inglés.

Pero la sorpresa de este verano la ha dado el Mónaco, a última hora y casi en silencio, firmando el traspaso más caro de la historia por un jugador francés, en concreto, un diamante en bruto de 19 años que el año pasado firmó 9 goles en 35 partidos de liga.

El traspaso de Martial, que puede alcanzar los 80 millones de euros, le sitúa por encima de Zinedine Zidane, como recuerda hoy el diario "L'Équipe" en su portada, y le deja una notable plusvalía al Mónaco, que dos años antes había pagado por él 5 millones al Lyon.

Le coloca, además, como el sexto jugador más caro de la historia del fútbol, empatado con el colombiano James Rodríguez, por el que el Real Madrid pagó 80 millones también al Mónaco, y solo por detrás de Cristiano Ronaldo y Chistian Bale, del Real Madrid, y Neymar y Luis Suárez, del Barcelona.

Se trata de la guinda a un verano de liquidación en el club del Principado en manos del magnate ruso Dmitri Rybolovlev, que ha ingresado 189 millones de euros con las ventas también de Kondogbia al Inter de Milán por 40 millones de euros, Abdennour al Valencia por 25 millones, Kurzawa al PSG por otros 25, Ferreira Carrasco al Atlético de Madrid por 20 millones, Radamel Falcao al Chelsea por 10 millones.

Si a ello se suman los jugadores que han abandonado gratis o cedidos el club, el Mónaco que dirige Leonardo Jardim ha renovado prácticamente la totalidad de su plantilla, con un gasto de 61 millones de euros en fichajes como los de Traoré, Rony Lopes, Boschilia, Carrillo, Saint-Maximin, Jean, Lemar, Calveiro, Bahloui o Fábio Coentrão.

Otro de los episodios candentes del mercado estival de fichajes en Francia fue la contratación -de emergencia- del español Miguel González "Míchel" como técnico del Marsella, después de que el argentino Marcelo Bielsa, al que apodan "El loco", presentara su dimisión por sorpresa y con la liga ya empezada.

Por 54 millones, el club mediterráneo ha rescindido o cedido a jugadores como Imbula, Thauvin, Payet, Ayew, Gignac o el español Javi Manquillo, mientras que ha reclutado a Ocampos, Rekik, Sar, Nkoudou, Diarra, el brasileño Lucas Silva o el chileno Mauricio Isla por un total de 16 millones de euros.

El Lyon que dirige Hubert Fournier, que fue segundo la pasada campaña y que en 2016 estrenará estadio, ha centrado su política en renovar a sus grandes jugadores, con el cotizado delantero Alexandre Lacazette a la cabeza, seguido de Fekir, Tolisso o Lopes. No obstante, también se ha hecho con los servicios de Darder, Yanga-Mbiwa, Mathieu Valbuena, Beauvue, Tousart o Kenem.